5.12.2016

transOm

Voy. O vengo. Son cosas que ya ni se notan. Los vaivenes. Un sonido sordo que nos pesa y deviene estupor se escurre entre tanta gente. Queda tanto por hacer, el deber y el no querer. Hacerlo cuando sólo quiero debo ansío. Dormir y no puedo. Y en el espacio vacío de noche infinita la mente en todo lo que no, ya no. Si supieras decirlo. Solo tomaría un instante. Brevedad concisa y una sonrisa. Que hay que ser optimista y se retuercen mis vísceras. Dañadas por el tiempo. Si alguna vez, sabes... No. No tendría ningún efecto ser conciliatorio. A estas alturas. Ni contigo ni con nadie, sabes. Y miro por la ventanilla del avión. 

Allí están, abajo. Las huellas. Los sinsabores. La felicidad que nunca. Polvito blanco, nieve o arena. Tendrías que escoger uno y hacer un clavado. Espectacular, como en Acapulco. Ah, qué vacío todo aquello y su ruido. El color de los recuerdos. Cantinflas y Elvis en Acapulco. Al tocar tierra o mar o nieve o arena te romperías la crisma. Papaya rota en dos de cuatro, mercurio zigzagueante en bolitas veloces, buscándose. Romper termómetros adrede para observar la incapacidad del amor, mercurio del ser. Serlo. Amor frugal. Trivial. Tráfago. Trufa transitoria como ráfaga tríptica. Y el silencio. Descríbemelo, eso que nos engulle voraz. No. No existe, eso. Ni se siente. Solo está. Abajo. De todo lo demás. Lejos. Y ausente aunque de presencia constante.

Leo distraída las notas de un amigo que analiza el preciso instante o el instante preciso. Cierro los ojos y sonrío. Otro pone fotos de las destartaladas mujeres de Picasso. Hechas líneas ni precisas en cualquier instante. Las mujeres. Qué agonía. Qué maravilla. El perfume y la peste. Momentáneas. Furtivas hijas de su madre. Malditas.  Me miro en un reflejo y el pelo me cubre la frente. Aún tengo cara de tonta. Boba. Comemierda. La belleza efímera queda sólo como arenilla. O congelada en la nieve.  ¿Y si me hago otra de un otro simultáneo? Esfumarse en las espumas y decaer en náuseas. Ser un ser o no. Mercurio desgranado en busca de un entero. Niña tonta seria estudiosa y en el cerebro aserrín absorbente de tanta mentira. Se trata de eso. De no poder asimilar más embuste. Y sin embargo, it's the filtre of choice. Por qué se miente ella, y la otra y la otra y las demás. Y tú, mentirosa de profesión. Y miro por otra ventanilla de otro avión. Lleno de gente fea. ¿Acaso te crees bella? Mucho. Demasiado.  Mi belleza es intransitable. En transición constate y fija en el clavado suicida. El de corre, abre la puerta y tírate. La mujer me mira de soslayo. Miro hacia otro universo.  Versom ommm. Nunca he pertenecido a este.  Verso a verso.  Versátil.  Transpiro y la veo, tan de lejos. A mi mujer que fui un día.  Mujerom. En trans. Trance de no ser yo. Sí o no.