10.20.2016

roomwithAview

la llamo para preguntarle que a qué hora la recojo. estoy en el culodelmundo y odio manejar, pero eLLa se ríe sabroso y me contesta que no tengo que recogerla. pero habíamos quedado... protesto. ya te viste con la otra? pregunta risueña, y sigue: ...porque seguro está brava, que hace días que no la atiendes. y se mea de la risa. con cuál de ellas me tocaba hoy? contesto suavecito. no sé, tendré que fijarme en tu agenda, resopla... ah, sí, las de los ojos pardopúrpura... de ahí vengo, digo heroica, de atestarle dos buenos revolcones... por eso me apetece verte, para calmar los nervios, tú mi remanso de paz... y se muere de la risa, eLLa.  

es otoño en la ciudad que amo, y todo me traquetea. que si la artritis y la tristeza que me domina, que si el mundo está a punto de... y las putas elecciones, que no acaban de llegar para que empiece otro ciclo o ciclón, ya veremos. pero esta nena que se hizo mujer delante de mis ojos bizcos y siniestros, quien se burla de mí con tremenda elegancia y de mi trajín mental entre las sombras de otras tantas, es la luz de mi quinqué. me encanta, confieso, que sea así. que eLLa ignore todas mis boberías y letanías y le haga el menor caso a lo que digo, escribo, hago o deshago es mi gran regalo, a estas alturas de la vida en que soy manojo de nervios y obsesiones críticas, masa en velo y la muerte en cámara lenta. 
no miento si digo que en su sangre fría se filtra el fuego de la mía, líquida y queda gota a gota toda la basurilla que me consume. que en sus ojos radica la explicación del fenómeno que he sido, en vano y vanidad. un espejo turbio eLLa que guarda mis fragmentos, yo hecha añicos y eLLa intacta. tal y como debe ser.

y me monto en el carro, me ajusto las gafas y cruzo esta ciudad de mi alma entera mientras canturreo todas las canciones malas que componen el fondo musical de mi vida. ansiedad de tenerte a mi lado... y ya, al rato la veo a lo lejos, cimbreante en una esquina y me trae recuerdos inolvidables. de otra. cosas que no valen la pena borrar porque sería hasta peor desvencijar la memoria. porque sin ellas todas eLLa nunca hubiera llegado. ágil se sube al carro, me mira seria y luego se ríe cuando me besa. llévame a pasear, dice, que seguro has estado con la otra todo el día, metida en un cuarto oscuro, hablando boberías... pues no, te equivocas, digo ufana. lo hicimos al aire libre, cerca de un río, comiendo higos... ah bueno, entonces llévame a mí a ese cuartico. el que me gusta... to the room with a view? pregunto tonta, llevándome una roja a la deriva. esa. y así, seguimos el viaje, en medio del atardecer.